La marcha de los descalzos

Doce mil trabajadores sin tierra marchan sobre Brasilia exigiendo reforma agraria

Son 12 mil personas caminando. Partieron de Goiana el 2 de mayo y llegarán a Brasilia, a 190 kilómetros de distancia, el 17 . Transportan una ciudad ambulante, con baños químicos, cocinas, carpas, equipo de radio, enfermeras y ambulancias.

Para integrarme a la marcha me entregaron una mochila MST, con su kit de cartillas de formacion, una radito, prestada por el Foro social, una botellita de agua (vacía), una tarjeta de identificacion con informaciones sobre los kilometros y los lugares para cada dia y varias consignas: Nunca te pierdas de tu "turma" (grupo) (la mía, de Rio Grande do Sul), si te pierdes, busca la bandera gaucha (difícil), si te sientes mal, te sientas en la orilla y esperas a que llegue el equipo de salud ; ellos te ayudan y si el caso es grave, llaman a la ambulancia. No tienes que dejar que se formen espacios en la fila: hay que avanzar siempre de a tres filas y en conjunto, sin distanciarse mucho.

Para estar informado, cada participante tiene una radito con programacion : cantos, espacios educativos (el Acuerdo de libre comercio ALCA, el papel de la mujer en la agricultura; la participacion de los jovenes; el por qué de la marcha). Si tienes sed, le pides al proveedor de agua que te llene la botellita. Recomiendan beber mucha agua, aunque en el camino solo los hombres pueden aliviarse, por razones obvias. Pero es un estado seco y hay mucho sol, no se debe uno deshidratar.

Llegué a eso de las seis de la tarde a incorporarme. Me prestaron un colchón y una colcha y me dijeron que me instalara en la carpa de Rio Grande do Sul. Eramos 800 en una carpa para 600. Es decir, más que amontonados, pero todos muy cordiales y tratando de hacer espacio donde no había. Quedé al medio, entre una muchacha joven y su madre, y un muchacho al que no logré verle la cara. En la noche no es facil dormir porque hay niños que lloran y mucha gente que tose. Hay una epidemia de gripe que se expandió por la marcha con una rapidez enorme. Para salir a los WC quimicos hay que ser acrobata o volar entre la gente. Mucha gente ya no los usa porque estan un poco sucios, pero tampoco aconsejan ir al campo porque hay cobras.

A las 4 y media de la mañana empieza el movimiento y a las 5 ya suena la diana. En media hora, aunque no parezca posible, 800 personas se levantan, doblan sus colchones, mantas y ropillas y las meten en bolsos marcados. Sacan todo y un camion por Estado se lleva las pertenencias que despues recojerán los marchantes
en el nuevo campamento 16 o 20 km más adelante. Media hora despues de la diana estamos todos ya de la mano para partir y la brigada logísitca esta en pleno desarme de la carpa. Nuestro Estado espera su turno para partir. Este día San Pablo va primero, nosotros somos el penúltimo estado. Cada dia es un estado diferente que tira de la marcha, con cantos, ritmo de caminata y programas de animación.

La caminata es larga y una hora después nos distribuyen dos panes por persona. Uno se sacrificó por mí y me dio sus panes. Tenía hambre porque me había dormido antes de la cena , que llegó muy tarde, a eso de las 11 de la noche. En el camino hay los que se quedan atras, un minusválido que marcha más diciplinado que nadie y todos cuidan, uno que se volvió loco. Cuentan del caso de un señor que tenia cáncer terminal y que quiso ir a la marcha. Al principio no querian aceptarlo pero se discutió su caso y lo aceptaron. Murió a los dos dias, marchando. Aqui todos tenemos un objetivo personal, individual, pero por sobre eso está nuestro objetivo comun: hacer presion por la reforma agraria. Es como una romería, me dice un participante y tiene razón.

El distribuidor de agua me pregunta varias veces si no necesito agua. Yo, no, gracias, digo tambien varias veces pensando en los baños que no hay en el camino. Por ahí se escapan tres mujeres de la marcha y las sigo, feliz de encontrar a otras con el mismo problema. Se trata de avisar a los compañeros que no vengan por estos "matos" (matorrales). La caminata se hace larga porque hay muchas subidas. Todos van de chinelas y sombrero y después de varios kilometros hay algunas chicas jovenes urbanas que se sacan las chinelas porque tienen los pies rotos. Hay muchos jóvenes que apoyan la causa y van por la romería.

La llegada de la etapa es maravillosa: te espera tu carpa y a buscar los colchones e instalarse. Cuesta, porque somos 800 en lugar de 600. Preo con voluntad (aquí hay mucha) todo se logra. Y nada de nada se pierde. Una señora recorre toda la carpa para entregar una peineta a quien la ha perdido. Llegando, los más osados van a bañarse un río cercano, los otros a los baños (baldes de agua fresca para ducharse) que ya fueron instalados. Y a lavar ropa, porque los brasileros son muy limpios y lavan y se lavan mucho. Hay que esperar el almuerzo que se distribuye por Estados. Luego vienen las reuniones por responsabilidades. Mucha gente tiene responsabilidades: seguridad, salud, coordinacion, cocina, infraestructura, limpieza, formacion etc. En la tarde ya no se marcha, sólo se siguen las formaciones por la radito. Y en la noche se proyectan videos sobre agricultura orgánica, organizacion, Foro social. Todo el material está prestado por el Foro social y otras entidades.

Es la ciudad ambulante, la ciudad de los descalzos que tienen un sueño, individual y colectivo, una vida mejor para todos.

Cecilia Díaz, Frères des hommes Belgique

La marcha de los descalzos Doce mil trabajadores

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